miércoles, 28 de septiembre de 2011

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A lo lejos, media luna asomaba los ojos por encima de una gran nube que me recordaba a un frondoso y gran árbol de las selvas amazónicas.
Mientras, en la Tierra, una chica, absorbida por las dudas, se debate entre la idea de lo que está bien y lo que está mal. Se intenta  convencer a sí misma sobre lo que quiere y lo que no. Lo que sería mejor para ella. Pero por mucho que le guste una cosa, no puede evitar que le atraiga otra. Sin embargo, hay que pensar en lo que pesa más… Y no sé lo que quiero.
“Me enervan los que no tienen dudas y aquellos que se aferran a sus ideales sobre los de cualquiera”. Por otra parte, los aprecio, de vez en cuando estaría bien no dudar, no pensar, no tener dolores de cabeza, porque, ¿en qué vas a pensar?, lo tienes ya todo claro, ¿no?
A lo largo de nuestra vida creemos conocer a las personas que nos rodean. Ni del palo. No tenemos ni puta idea. No sé ni quién soy yo. No sé lo que quiero, y hoy, tampoco me apetece saberlo.
Intento escribir algo con el fin de que, al final, pueda sacar algo de lo que siento, pero es que no lo sé. No dejo de pensar y no pienso nada. Como el perro que ni come ni deja comer.
“Quiero dar vacaciones a mi ego y liberar el caos”. Últimamente no dejo de pensar en esa frase del gran Kase.O. Y es que me apetece evadirme, desaparecer, pegar, gritar, sin ninguna razón, no la necesito, es lo que quiero hacer: liberar el caos que guardo bajo esta fachada aparentemente ordenada. Pretendo estar “políticamente correcta” porque nadie tiene la culpa de lo que a mí me pase, pero no quiero saber nada de nadie. Que os den. Todo a la mierda.
Me molesta, me molesta tener que estar bien, siempre bien, por personas que ni conozco después de tantos años, no poder decir nada, joder. Me molesta que me decepcionen. Esperar algo de alguien y no obtener nada, por eso intento no esperar nada de nadie, pero es inevitable. Me molesta estar cansada de algo pero no poder dejarlo porque tampoco puedo vivir sin ello. ¿Acaso algunos de mis pensamientos tienen pies o cabeza?
Solución: ninguna. No me pasa nada y me pasa de todo. Ganas las mías de estar aquí a estas horas sin decir nada. Necesito volver a las necesidades vitales: una ducha, el agua se suele llevar algo más que la suciedad del cuerpo; comida, con el estómago lleno sólo pienso en que tengo ganas de dormir, descansar de todo. Un abrazo, sin palabras, sin tonterías, sin agobios, solo un abrazo, respirar, un cigarro, aire, una canción…no pensar en nada más. Mañana me organizo la tarde para no tener ni un segundo libre y no pensar en nada que no sea…estudiar? correr? dormir? comer? coger una pistola, atracar un banco y huir a la isla de la locura en el país de la demencia.

domingo, 4 de septiembre de 2011

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Las extensiones son de cani y las crestas de punkis. Nada cambia. Todo sigue igual. Yo sigo rayándome por las mismas tonterías. Mis dudas. Mis no sé qués, mis qué se yos. Sin sacar nada en claro, no me aferro a nada por miedo, y si lo hago lo mando a la mierda por miedo. No sé lo que quiero y no voy a empezar a saberlo hoy. La vida sigue, y yo sigo así...tampoco tengo intención de cambiar. Cómo voy a cambiar algo que soy. Sí, cada uno elegimos cómo queremos ser, pero esto es algo que no puedo evitar. Mi pasotismo. Mis cagadas. Qué sería yo de mí sin ellas.